Si el próximo gobierno que surja producto de las próximas elecciones del 2 de mayo, continúa con los mismos vicios de la actual administración, -sacudida por una serie de escándalos- habrá una explosión social caracterizada por constantes protestas de diversos movimientos, que provocará la ingobernabilidad, advirtió ayer el general retirado, Rubén Darío Paredes.
El militar sostuvo sus planteamientos ante una serie de hechos que no han sido aclarados y en su lugar se ha tejido un ambiente de dudas como la licitación de la Casa de Punta Mala, la insistencia por la mandataria a no revelar el uso de la partida discrecional, su participación constante en actos políticos y el nombramiento de 31 personas bajo el cargo de "servicios profesionales" cuyo monto asciende a B.900 mil "esto es la máxima expresión de descontrol, por un séquito de la presidenta", sostuvo Paredes.
Indicó que los escándalos que nunca llegan a aclararse, representan una amenaza para el sistema democrático de cualquier país de Latinoamérica y aconsejó a los gobernantes a mirarse en el espejo de Venezuela donde el descontento popular, respaldado por otros sectores, tambalea la silla presidencial de Hugo Chávez.
