Se acabó la pesadilla para los Celtics de Boston, que ganaron ayer por paliza de 99-65 a los Hawks de Atlanta en el séptimo partido de la eliminatoria de la Conferencia Este para conseguir su pase a las semifinales de la NBA.
Los Celtics, el equipo con la mejor marca de la temporada regular, tendrá ahora que enfrentarse a los Cavaliers de Cleveland de la estrella LeBron James que ganaron por 4-2 a los Wizards de Washington en la primera eliminatoria.
La historia del séptimo partido fue la misma que se había dado en los tres disputados en el Banknorth Garden de Boston, donde los Celtics arrollaron a los Hawks, que, sin embargo, en su campo del Philips Arena, habían logrado empatar la eliminatoria, la única que se extendió a siete encuentros.
Esta vez sí respondieron dos de los "Big Three" con los aleros Paul Pierce de máximo encestador y Kevin Garnett que consiguió un doble-doble para los Celtics.
Pierce con 22 puntos lideró una lista de cinco jugadores que anotaron en doble dígitos para los Celtics que tuvieron un 47, 6 por ciento de acierto en los tiros de campo, comparado al 29, 3 de los Hawks.
Garnett consiguió 18 puntos (9 de 13 tiros de campo), 11 rebotes, tres asistencias, recuperó un balón y puso un tapón para dominar el juego bajo los aros.
También el pívot Kendrick Perkins aportó un doble-doble con 10 tantos, 10 rebotes y puso cinco tapones.
El alero León Powe con 12 tantos y cuatro rebotes fue el sexto jugador para los Celtics que lideró a los reservas del equipo a los que el entrenador con el partido decidido desde el tercer periodo les dio oportunidad de jugar en el cuarto.