Hablar de una edad específica en estos tiempos es muy difícil. Hay quienes se casan siendo muy jóvenes y aquellos pasaditos en edad, y fracasan. Sin embargo, es peligroso formalizar relaciones serias o compromisos demasiado pronto. Las relaciones que conducen al matrimonio requieren madurez: un grado de desarrollo mental y emocional. Geraldine Emiliani, psicóloga, explicó que algunos jóvenes formalizan relaciones a una edad muy temprana, pues no comprenden la belleza, seriedad y desinterés del matrimonio. Hoy en día casarse después de los 30 años tiene sus ventajas. Se supone que los contrayentes deben tener un empleo remunerado, y madurez en la relación interpersonal con el amado(a).
Sima Maoz, también psicóloga, agregó que una de las desventajas de casarse temprano es que la pareja tendrá muchos conflictos, siendo inmaduro emocionalmente y concentrándose en sus necesidades y no en las de ambos como una unidad. Es necesario la planificación. �sta en el matrimonio es fundamental, la pareja debe dialogar sobre sus expectativas, cantidad de hijos, en fin.
La sociedad señala que una mujer mayor de los 30 años está en problemas con respecto a la búsqueda de su pareja. Es mejor casarse tarde pero bien, que temprano y divorciarse a los meses o a los pocos años. Si no preparan bien el viaje más importante de su vida, luego no te sorprendas si algo sale mal.