Millares de musulmanes marcharon por las ciudades de varios países islámicos, desde Asia hasta el Medio Oriente, quemaron banderas de Estados Unidos y realizaron diversos tipos de protestas ante acusaciones de profanación del Corán por el personal militar norteamericano en Guantánamo.
El general Bantz Craddock, a cargo del Comando Sur estadounidense, del que depende la base naval de Guantánamo, rechazó el apelativo de "gulag de nuestra época" que la organización Amnistía Internacional aplicó al lugar.
También, el general estadounidense Jay Hood dijo que se han identificado trece presuntos incidentes que conciernen al Corán en Guantánamo pero no existen "pruebas creíbles" sobre el caso del libro sagrado musulmán que supuestamente se tiró en el inodoro.