El gobierno de Costa Rica decretó ayer una emergencia nacional para ayudar con más agilidad a las comunidades afectadas y enfrentar los daños que provocó la semana pasada en el Pacífico y zona sur del país la tormenta tropical "Alma".
El decreto de emergencia, que fue firmado por el presidente óscar Arias, "permitirá que el Estado pueda disponer de recursos económicos de una forma más expedita, lo cual ayudará a reparar caminos y carreteras entre otras labores", indica un comunicado del gobierno.
El ministro costarricense de la Presidencia, Rodrigo Arias, explicó que "nos quedamos cortos en cuanto a la magnitud de los daños que habíamos estimado".