A pesar de las reiteradas palabras de la presidenta de Panamá, Mireya Moscoso, de respaldar la prohibición a la cacería de ballenas y demás cetáceos en los mares, el representante de nuestro país en la cumbre de Sorrento, Italia, votó a favor de la muerte de algunas especies de estos grandes mamíferos, según denuncian organismos ecologistas.
Tal como informó Milko Schvartzman, vocero de la Campaña Ballenas de Greenpeace en la conferencia de Italia, Rogelio Santamaría, delegado de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) ante la Comisión Ballenera Internacional (CBI), votó en más de una ocasión por propuestas que incentivaban la caza de ballenas en peligro de extinción.
"Se puede ver que Panamá voto en cuatro cuestiones del lado de Japón, y en otras cuatro del lado de los conservacionistas; se podría decir que fue 'neutral', pero no es tan así: por lo que sabemos el delegado por Panamá, estuvo en todo momento trabajando junto a la delegación de Japón, y no accedió a conversar siquiera con algunos delegados de países conservacionistas", indicó Schvartzman.
El cambio en los votos de Panamá que se vio el tercer día de reunión se evalúa como un cambio debido a la orden que desde Panamá se le habría instruido, de votar de manera conservacionista, pero que no cumplió en todos los votos, agregó Greenpeace.
BALLENAS EN EL 2003
Unas 647 ballenas mató Japón, a diferencia de 590 de Noruega y 38 de Islandia, en el año 2003.