La policía británica detuvo a nueve personas en conexión con los fallidos atentados del 21 de julio en la capital inglesa.
Se informó que los arrestos se efectuaron en el sector de Tooting, en el sur de Londres. Seis hombres fueron aprehendidos en un allanamiento y los tres restantes en otro operativo, informó la BBC.
Así mismo, fueron detenidas tres mujeres en Stockwell -también en el sur- sospechosas de haber dado albergue a algunos de los implicados en los ataques.
EN FUGA
Un periodista de la BBC indicó que al parecer ninguno de los detenidos es uno de los tres sospechosos que siguen prófugos luego de atentar contra el sistema de transporte londinense, el jueves 21 de julio.
Poco después de los operativos, el comandante de la Policía Metropolitana, comisionado Ian Blair, reiteró que era imperativo detener a esos hombres pues es posible que "traten de golpear de nuevo" a Londres.
Blair agregó que puede haber más "células" organizadas con capacidad de realizar ataques.
ES CULPA DE GUERRA
Entretanto el M-I5, el servicio de contraespionaje británico, declaró que la guerra en Irak es un "factor determinante" para que los extremistas islámicos cometan atentados como los perpetrados el pasado día 7 en Londres.
Un grupo de expertos del M-15 advirtieron en un estudio de que la guerra de Irak era "un foco para una serie de actividades terroristas en Gran Bretaña".
El miedo de Scotland Yard a nuevos atentados está más que fundado, ya que la policía ha encontrado en un coche decomisado hace poco unas 16 bombas de clavos listas para matar.