Después de cinco años de haber nacido COOSEMUPAR como empresa cooperativa productora de banano no ha podido levantar su economía y los 2, 800 trabajadores viven un clima de incertidumbre cada quincena.
Se le adeudan a las casas comerciales que suministran insumos, a los acreedores, a la Caja de Seguro Social, al Banco Nacional de Panamá, entre otros.
El problema inició en el 2003, pocos meses después que el presidente de esta cooperativa, en ese momento José Morris Quintero, no pudiera controlar la sigatoka que le costó a la cooperativa cerca de 4 millones de dólares en pérdidas.
Desde allí se mantiene sometida a una gerencia interventora que impidió el secuestro total de sus bienes que se estiman en 50 millones de dólares incluyendo el valor de la plantaciones.