Portugal se mostró ayer decepcionado ante el pobre resultado de Cristiano Ronaldo y su selección en el partido del sábado ante Dinamarca, cuyo empate a uno ha dejado en manos de la suerte las pocas posibilidades lusas de llegar al Mundial de Sudáfrica 2010.
El delantero de origen brasileño Liedson, que pudo defender los colores lusos tras nacionalizarse portugués el mes pasado, es en cambio, en los medios y los cafés, el héroe del partido.
En cambio, Cristiano Ronaldo, el fichaje estrella del Real Madrid, era "el espejo de la desilusión portuguesa", como afirmó ayer el rotativo deportivo A Bola que recoge una lacónica frase del jugador madeirense: "Estamos tristes, porque sabemos que podemos hacerlo mejor".
Los medios deportivos lusos, habituados a idolatrar a CR7, no dejaban de recordar el bajo rendimiento del delantero en los partidos de clasificación de su selección, a la que ha ayudado poco a superar una mediocridad que puede dejarla sin billete para el Mundial.