Aunque la leche de vaca sigue siendo una de las más consumidas alrededor del mundo, existen muchas personas que, por alergias, intolerancia a la lactosa o mala digestión, han optado por el consumo de leches vegetales, como la de avena, de soja, de arroz, de almendras, entre otras.
Estas leches son más ligeras, fáciles de digerir y, en cuanto a la forma de consumo, éstas pueden tomarse de la misma manera que la de vaca: con los cereales, en alimentos cocinados, en sopas y hasta en salsas.
Se puede destacar que la ingesta de dos vasos de leche de almendras aporta aproximadamente el 35% del calcio que se recomienda tomar a diario. Además, siempre se puede complementar con otros alimentos ricos en calcio.