Saludos amigos y amigas del béisbol, bienvenidos a otra jornada de la pelota criolla, hoy algo triste por algunos comentarios que se han vertido en medio de una selección de béisbol que no reconoce el talento y cuando eso pasa, pagamos todos juntos por pecadores.
El equipo panameño fue escogido ayer, por la premura de comprar tickets de avión rumbo a Venezuela, y como decía mi abuela Petra... "el apuro trae cansancio".
Los apuros, comprensibles en parte, traen como consecuencia que quede fuera de la hueste nacional el prospecto capitalino Luis Durango de los Padres de San Diego, campeón bate en tres ocasiones en la pelota profesional y aspirante a llegar a las Grandes Ligas.
�Luis Durango? �Sí, señor, el mismo que acabó arriba de los .400 puntos hasta hace una semana en la pelota profesional!
�Señor, perdónalos, porque no saben lo que hacen!
Quizás no saben quién es Durango, cuáles son sus facultades y cuál es el nivel de su talento. Panamá se da el lujo de dejar fuera de su equipo al pelotero más rápido de toda una organización. Se da el lujo de dejar fuera a un primer bate natural, rápido como una liebre (liebre que no existe en la selección criolla) e inteligente para jugar a la pelota.
Pero ellos tendrán sus razones.
�Por qué no meter a Durango en el equipo?
�Quizás para evitarse el pago de 100 dólares y cambiar el nombre de un tickets de avión?
�Por ignorancia?
�Por capricho o hacerse sentir como el más bellaco?
Yo prefiero no saber las razones, simplemente me limito a las consecuencias.
En el futuro, esos mismos dirigentes deportivos se preguntarán: �Por qué Durango no quiere jugar con Panamá?
Pero no se acuerdan de sus pecados, de lo que no hicieron y lo que no valoraron.
El béisbol es el mismo en todos lados... lo único que la velocidad es diferente aumenta hasta llegar a su máxima expresión en las mayores.
No se si reír o llorar, jugando a los más serios... correctos, Panamá es el súper equipo que no necesita de los jóvenes talentos, ya dejaron fuera y nunca se contempló a Kevin Ramos, hoy es Luis Durango... en el futuro no se molesten en llamarlos...
�Viva, Crítica en Línea el béisbol!