Batalló por la vida por casi tres semanas, pero al final no pudo: la muerte lo venció.
Luis Galván Castillo, un repartidor de mercancía seca de 31 años, inició a las 4:00 de la madrugada de ayer, lunes, su último viaje, el que ya no tiene retorno, el que conduce al más allá.
Castillo había quedado sin extremidades inferiores luego que el Chevrolet tipo panel que conducía, fue colisionado por el busito Coaster, de la ruta Panamá Viejo-Terminal, el pasado 8 de octubre, a la altura de la vía Cincuentenario, en el corregimiento de San Francisco.
El conductor de la chiva alegó que otro vehículo se le metió por delante y lo hizo perder el control.