Muchos panameños son fáciles de embaucar por charlatanes y brujos. Hay compatriotas que creen cualquier cosa, con tal de conseguir sus deseos. Hace años una joven de buena posición estaba enamorada de un caballero de su mismo nivel, pero que no le hacía caso.
Se le ocurrió acudir a un brujo que dizque era experto en conseguir "los amores imposibles".
El bellaco le preparó un "tratamiento" que costaba sus buenos billetes. Y entre los tratamiento estaba el famoso "baño".
Aunque usted no lo crea, la joven se metió en el baño del brujo sin ninguna malicia. Este sinverg�enza se aprovechó de ella y... �la violó!
Consultó la afectada a conocidos para poner una denuncia, pero se le dijo que eso sería imposible. Ella misma se había metido en el baño y no había ninguna prueba de la violación.
Otros panameños no han pasado por experiencia tan negativas con los llamados brujos, aunque también han sido víctimas de estafas.
Uno de los cuentos preferidos es que hay que tener cierta cantidad de plata para hacer "el trabajo". Luego ese dinero desaparece y no hay autoridad que castigue al abusador.
Incluso, hasta propiedades se han perdido por maniobras de estos brujos descarados, que realmente son estafadores y delincuentes.
En la mayoría de los casos, el afectado acepta el engaño, a veces porque le da verg�enza que se enteren de su inseguridad.
Recuerdo que uno, incluso, inventó un "sancocho de gallinazo" para "curar" el cáncer. Y había panameños que se atrevían a tomar el brebaje que por cierto costaba bastante plata.
Añada a estas estafas otras más pequeñas, como la venta de perfumes y baños para la suerte, el amor, el éxito.
Hay gente que creen totalmente esos cuentos y usan las bebidas que nunca lograrán los "milagros" que anuncian.
Donde hay mucha gente que cree eso de la brujería es en la Lotería.
Todo tipo de maquinaciones hay alrededor de los juegos de azar, y por supuesto, muchas personas caen en trampas.
Lo curioso del asunto, es que las autoridades panameñas no hacen algo efectivo para controlar estas estafas y ataque a la moral.
Cualquiera viene a este país y tiene programas de radio, anuncios en periódicos y hasta la TV, donde es evidente la falsedad de sus propuestas.
Con razón dicen que cada segundo nacen diez personas... y una de ellas se aprovechará de las nueve restantes. �Esos tienen que ser panameños!