Luis Sánchez Torrijos y su amigo Milton Antonio Reyes fueron condenados a 66 meses con 10 días de prisión por ser responsables de un vivero de marihuana, que cultivaban en un lujoso apartamento de la calle Uruguay.
Los dos fueron arrestados en julio cuando las autoridades antidrogas encontraron unas 254 plantas de marihuana cultivadas dentro de un apartamento y 7 kilos de marihuana.
Aunque los acusados alegaron que el canyac era para consumo personal, la Fiscalía de Drogas refutó ese argumento, afirmando que era para la venta.