Las autoridades de Salud advierten que es muy posible que el cólera llegue a Panamá, por los canales normales o de manera clandestina. Ya los panameños sabemos lo desastrosa que puede ser esta enfermedad; a principios de la década de los 90, cobró 84 vidas y enfermó a 3, 645 personas.
La condición de país de tránsito que ostenta Panamá aumenta el peligro y la permeabilidad de nuestras fronteras, hace más difícil el trabajo de prevención de las autoridades. Solo hay que recordar que el cólera entró a Panamá de manera furtiva por una trocha de la provincia de Darién.
A los panameños nos tomó cuatro años vencer este brote, que se convirtió en epidemia. Hubo una exitosa campaña de concienciación por todos los medios de comunicación que existían y la población puso de su parte para frenar el avance de esta mortal enfermedad.
Es muy posible que nuevamente tengamos que enfrentar el cólera, luego de 20 años de vencer ese brote. Ha habido importantes avances en materia de dotación de equipos y construcción de instalaciones hospitalarias, pero igualmente los peligros de contagio han aumentado.
Nos parece oportuno que las autoridades de Salud hayan partido por delante advirtiéndole a la población el peligro que se cierne sobre el país. En caso de que se produzca el primer caso, la lucha será difícil y requerirá del aporte de todos.
Hay que intensificar los hábitos de aseo personal, los comercios tienen que brindar un servicio de calidad y las autoridades municipales cumplir con su tarea de mantener la ciudad lo más limpia posible.