Molestos se encuentran los residentes de Llano Bonito, en Río Hato de Antón, porque la carretera que conduce al lugar está en pésimo estado.
Lo más preocupante es que ya los transportistas no quieren prestar el servicio, debido a que se les daña sus vehículos.
Según los pobladores deben caminar largas horas y hasta se exponen a muchos peligros por la falta de buses.
Rogelio Herrera, morador del área, manifestó que es triste ver como los estudiantes llegan a las nueve de la noche a sus casas, sucios y cansados de tanto caminar.
Alegó que en la época de invierno la situación es peor y por eso urge la construcción de una carretera de asfalto.
Por su parte, Santiago Torrero Sánchez, afectado, precisó que como no hay transporte ha optado por utilizar una bicicleta para trasladarse de un lugar a otro; sin embargo, la situación es difícil porque ya se le ha dañado.