Los fieles clientes del local de la "Feria de Chello", ubicada en el corregimiento de Calidonia, casi se quedan con las ganas de comprar los víveres para las celebraciones de Año Nuevo en dicho sitio.
Sucedió que después de las 11:00 de la noche del sábado, tres sujetos se metieron a robar y casi destruyen todo el almacén.
Una fuente reveló que esos tres sujetos se escondieron para quedarse en dicho sitio después de la hora de cierre y así poder llevarse cuanto quisieran del almacén, pero no se percataron que escapar de algunos lugares suele ser más difícil que entrar a los mismos.
Los delincuentes utilizaron los primeros instantes en el lugar para hacerse con el dinero de las cajas de registradoras, y aliñar uno que otro comestible para la casa.
Una vez que cada quien escogió lo que se quería llevar de regalito de fin de año, llegó la hora de retirarse del sitio, dizque previniendo que alguien los descubriera.
Como no encontraban ruta de escape, procedieron a golpear algunas tuberías, pero lejos de encontrar un hueco por donde salir, lo que provocaron fue que el local se inundara.
Al fallar el "Plan A", recurrieron al "Plan B", que resultó ser peor que el primero, pues al intentar escapar golpeando una ventana con un extintor de incendios, hicieron que el aparato estallara y llenara de humo el sitio, lo que provocó la alarma de los vecinos que pensaron que había un incendio y llamaron a los bomberos.
Al llegar los camisas rojas y las unidades policiales, se hallaron con los tres sujetos mojados y pegaditos a la puerta, encontrándole a uno de ellos alrededor de 400 dólares metidos en sus partes íntimas.
Los hombres fueron capturados en el lugar y llevados en primera instancia para revisión médica al cuarto de Urgencias del Hospital Santo Tomás.
Después fueron remitidos a la Subestación Policial de San Miguel, en el corregimiento de Calidonia, donde serían puestos a órdenes de las autoridades competentes.
El diputado Sergio Gálvez llegó al local y aseguró que el almacén continuará funcionando.