Dicen que a los niños no se lloran, que son angelitos que se devuelven al Cielo, pero �cómo decirle a una madre que soporte callada aquel dolor que le consume el alma?
Y es que en medio de llantos y sufrimientos tendrán que despedir hoy, jueves, a un niño de 8 años, quien perdió la vida el pasado lunes, a la 1:30 p.m, en un edificio ubicado en La Cuchilla, Calidonia, a un costado del almacén "El Titán".
La madre del niño, quien se encuentra hospitalizada por tanto sufrimiento, estaba trabajando en aquel momento.
El menor, su hermanito de 12 años y un amigo de 16 años, decidieron esa tarde salir a volar sus cometas.
Su inocencia y deseos de aventura lo llevaron a escalar ornamentales y llegar a la azotea, donde el hoy difunto pisó un zinc de plástico y cayó. Falleció en el Hospital del Niño.
