La cobertura de los entrenamientos de la preselección mayor de béisbol que se prepara para participar en el Clásico Mundial de Béisbol, se ha convertido en toda una odisea para los diferentes medios de comunicación que a diario asisten al Estadio Nacional Rod Carew.
Desde que se iniciaron las prácticas la semana pasada, el cuerpo de periodistas y comentaristas ha tenido que conformarse con ver los toros desde la barrera. Ni si quiera se les permite el acceso al área de prensa del coliseo. �Así no se puede trabajar!
La idea es brindar la mayor cobertura posible al equipo y convivir como una familia, pero un sinnúmero de lineamientos impuestos por la gerencia del equipo, muchas veces no lo permite.
Ayer, sólo el manager Roberto Kelly conversó con la prensa, mientras, que los peloteros permanecieron mudos y casi de manera parca se limitaban a saludar a uno que otro comunicador.
Son las reglas y hay que seguirlas, es verdad. Pero a veces resultan algo exageradas y se deben rectificar para el bien de todos.