EDITORIAL
Custodia de enajenados homicidas
Enajenados mentales en el
enloquecimiento de sus desvaríos causaron la muerte o graves lesiones
a ciudadanos victimados, que obligó a enviar los extraviados enfermos
a soportar reclusión en las ergástulas, por la carencia de
instancias hospitalarias idóneas para ofrecer estas custodias, como
previene la legislación vigente.
En la destruida Cárcel Modelo existió "la celda
de los locos", en la cual fue recluido el conocido homicida "Barrabás",
y otros enfermos peligrosos que debieron soportar alejamientos sociales,
entre ellos uno de apellido Franco que ultimó a cuchillo a varios
familiares en San Francisco de la Caleta.
Los actuales personeros mandantes del régimen perredé
procedieron a la voladura de la vetusta Cárcel Modelo, buscando con
la destrucción el olvido de las agresiones de gravísimo atropello
a los derechos humanos que allí fuera filmado por un novel periodista
gráfico, y mostrando la imprevisión de no determinar el destino
al cual habría de dirigir a los enajenados homicidas que allí
cumplían reclusión.
Ahora, los enfermos con taras mentales que los convierten en sujetos
peligrosos, son enviados a las obsoletas instalaciones del Hospital Psiquiátrico
Nacional, sito en Juan Díaz, donde con facilidad, dadas las precarias
condiciones de seguridad inmobiliaria del recinto, pueden escapar y retornar
al seno social del cual se previene deben mantenerse alejados, incorporando
así peligro y alarma en el vivir ciudadano.
La realidad angustiosa que oferta la existencia de cuatro homicidas
insanos alojados en las instalaciones sanitarias del Hospital "Matías
Hernández" relieva los riesgos que amenaza a los vecindarios
populosos aledaños y a los particulares que en el entorno transitan,
que pudieran en la coyuntura de desgracia concluir en otra muerte infausta.
La denuncia sobre la tragedia que este diario formuló en su
edición de ayer no recibe las respuestas públicas que el evento
amerita; por lo contrario voceros de la Policía Nacional se declaran
ajenos al problema y desestiman que su alcance les afecte en sus labores
y responsabilidades, asumiendo postura de avestruz que esconde la cabeza
ante el peligro: la realidad es que las autoridades de mando nacional; en
especial las responsables de protección de la vida, honra y bienes
de los asociados y las hospitalarias deben avocarse a solucionar estos peligros,
y con prontitud encontrar soluciones idóneas, aún cuando con
ellas aflore el extravío de quienes destruyeron "la celda de
los locos", sin reemplazarla con instancias adecuadas por gobernar
al impulso hepático de las alabanzas; realidad que debe ceder paso
al planeamiento, la opción serena, y la adecuada ponderación
de los beneficios y los resultados.
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AYER GRAFICO |
Periodistas de ayer en campaña para escoger nueva directiva del Sindicato
de Periodistas |
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