TEMAS DE ACTUALIDAD
¡No es culpa de la estaca...!

¿Qué cosa más dura que la piedra? ¿Qué más blando que el agua? Pues el agua blanda cava la dura piedra...". (Ovidio)

Por Raymundo A. Moore V.

Todos sabemos que, aunque dura, la ley es la ley y hay que acatarla ("Dura Lex Set Lex").

Por ello, aun cuando casi todo Panamá estuvo (y todavía está) de acuerdo con las sanciones impuestas contra dos medios locales de comunicación social (por "desbocados"), de todas formas hay (y es bueno que existan) recursos legales para neutralizar ciertos (o los) efectos de esas mismas leyes, cada vez que sentimos que nuestros derechos individuales están siendo conculcados; en este caso, hablamos de la irremplazable figura del "Amparo de Garantías Constitucionales". Sin embargo, la peor sanción es la moral, que no solo censura, sino que rechaza y establece límites de conducta.

El castellano, como una vez me lo hizo ver el Ing. Angel Santiago ("Chago") Diez, "... es un idioma muy ladino...", observación ésta suya hecha en alusión a que (muchos años atrás), mis redacciones, en términos generales, eran, según él, muy insulsas; de allí que, interesado, me propuse hacer algo para mejorar eso que aquel profesional de la ingeniería civil me señalaba. No sé si lo he logrado, pero en el interim de esa búsqueda, descubrí que "... no es culpa de la estaca que el sapo salte y se ensarta...".

Según veo las cosas -políticamente hablando- nos estamos quedando cortos de estacas, con tantos políticos ensartados hasta el coccix como consecuencia de su desmedida e insaciable sed de poder.

Muchos de ellos, sin embargo, aunque están empeñados en buscar un nuevo período, deberían sentirse satisfechos de que lo que hicieron lo hicieron bien (¿cuántos de esos habrá?), pero que sus electores están deseosos de algo nuevo, gente con otras actitudes políticas, que vengan distintos y diferentes frente a tantos problemas socioeconómicos, cívico-culturales, y moral- espirituales. Yo le recomendaría a esos políticos que se tomen "un aire" para recobrar fuerzas... y volver, en un segundo intento, a ver cómo les va esa vez.

No es de extrañar, pues, que en este mes y medio que faltan de ajetreo político para elegir nuevos gobernantes, en ese mismo período el ambiente social quede impregnado de una inaguantable fetidez moral, como resultado de tantos sapos ensartados... y aquí los "sapos" no son esos "arrastrados" humanos que nunca faltan, sino políticos frustrados que quieren, pero no saben, como ganarse nuestros votos.

Otra cosa... sálganse de ese esquema de la baja politiquería que ... ¡ya cansa! Y "yérguense" como individuos capaces de promover un verdadero cambio en todo el frágil andamiaje de la sociedad panameña.

Esta población quiere... sí, quiere ser seducida, pero políticamente, con sensatez, visión y una real vocación de servir a los hombres y a la patria. Lo que no queremos son dirigentes que, en vez de seducir, lo que quieren (y muchos están logrando) es violar nuestros derechos individuales más elementales, con hipocresía y falsas premisas de un bien común en que ni ellos creen.

Allí está lo que dijo Murrow: "... Si un partido político se atribuye el mérito de la lluvia, no debe extrañarnos que sus adversarios lo hagan culpable de la sequía".

Ya es tiempo pues, digo yo, de recoger nuestro dedo índice, y comenzar a usar el pulgar.

"1999 ... AÑO DE LA DECENCIA"

¡Au Revoir!

 

 

 

 

 

 




 

AYER GRAFICO
Celia Cruz y Tito Puente llegan a Panamá para ofrecer un concierto de salsa


CREO SER UN BUEN CIUDADANO
Sin embargo soy perezoso


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