"Cero alcohol en nuestro corazón" es un llamado de reflexión de la Campaña de la Cinta Amarilla a toda la sociedad panameña para que vuelva a la cultura de la humanización, donde el mayor valor de la vida es la niñez, quienes con rostros sin voces y en silencio sufren la amarga y cruda realidad del alcohol y la violencia doméstica.
Por ello, el Movimiento Juventud Proyecto 2000 de Arraiján, como voluntarios al servicios de la comunidad y en apoyo con esta campaña solicita a las autoridades gubernamentales, programas activos e integrales que abarquen la educación, información, orientación y capacidad de apoyo; además de la regulación de leyes que permitan y modifiquen el poder del alcohol en nuestro país.
AFECTADOS
Los más afectados con el alto porcentaje de consumo de alcohol en nuestro país, son los niños y niñas, donde la falta de concienciación de padres abusadores afectan su desarrollo psico-emocional; en algunos casos se registran fuertes traumas de la violencia doméstica contra nuestros niños y niñas, dando como resultado el "síndrome post-traumático", originándoles dificultades para dormir, comer, disminuyéndoles su capacidad para aprender y muchas veces se comportan de manera antisocial, aseguró la secretaria del MJP 2000 de Arraiján, Niura Rodríguez .
CICLO REPETITIVO
La mayor parte de los casos de la violencia doméstica abarca que el 63% son padres abusadores que cuando niños fueron abusados por sus propios padres, lo que consideramos como "la semilla del maltrato". Nuestra niñez está en alto riesgo cuando crecen en hogares disfuncionales, donde el alcohol es el arma letal que activa la violencia doméstica, donde nuestros infantes conviven con altos niveles de estrés y los factores estables de la vida familiar no existen dentro de estos hogares, concluyó Rodríguez.