A pedradas y palos fue atacada la ambulancia del Cuerpo de Bomberos de La Chorrera, luego que los paramédicos de la institución optaran por no trasladar al Hospital Nicolás Solano el cuerpo sin vida de un joven de 21 años, de nombre Rubén Darío Requena, el cual se había ahogado en un balneario ubicado en el sector de El Espino.
El comandante Luis Felipe Cáceres, advirtió que no es la primera vez que los paramédicos deben hacer frente a las agresiones verbales y física de involucrados en accidentes u otros hechos. Explicó que al llegar la ambulancia al área los paramédicos se cercioraron que el joven no tenía signos vitales, por lo que procedieron a informar a la Fiscalía Auxiliar.