El Gobierno belga ha regalado a China una escultura de grandes dimensiones y valorada en cinco millones de euros con ocasión de los Juegos Olímpicos, pese a la polémica internacional por la situación en el Tíbet.
La obra, del escultor Olivier Strebbelle y titulada "Athletes Alley" ("La Avenida de los Atletas"), representa a cinco atletas con los anillos olímpicos y será inaugurada el 23 de mayo en un parque situado al lado de la villa olímpica en Pekín, según han anunciado hoy varios medios de comunicación belgas.
Con 105 metros de largo y veinte metros de altura, la escultura de acero lleva un precio de costo que se eleva a cinco millones de euros, y ha sido financiada por instituciones y empresas belgas.