La gente alrededor de la Plaza 5 de mayo observa la majestuosidad de las tarimas del Arnulfismo y del PRD. "Estas son las encuestas de carne y hueso", dice el candidato oficialista, mientras que el joven candidato torrijista arenga que "en su nómina hay cero corrupción y ganas de trabajar por un futuro mejor", al son de las canciones del próximo ministro de Gobierno y Justicia, Rubén Blades.
Pero susurros se escuchan en la muchedumbre: "Vine aquí a pasear y ver los dos cierres de campaña porque hay guaro y parranda", afirman varios jóvenes que por primera vez ejercerán su voto el domingo 2 de mayo.
"Mi jefa en un banco del Gobierno no va a ver por quien voy a votar el 2 de mayo, ella no estará detrás de mí en la urna", dice una funcionaria pública a un colega periodista. Ese es el parecer de la gente a cuatro días de los comicios.
La opción de Guillermo Endara y SOLIDARIDAD por no hacer un cierre de campaña al viejo estilo y realizan una caravana nacional desde Chiriquí, pasando por Provincias Centrales, la Ciudad de Panamá y terminar en Colón, es una alternativa diferente de concluir la promoción de la propuesta electoral del ex presidente, cuya popularidad puede haber aumentado significativamente en estos días.
Otros fenómenos antes de las elecciones del domingo son el evidente cambio de posturas para votar por un determinado candidato presidencial, además de la rabia de algunos votantes por tener que pagar el recibo de la luz eléctrica y el teléfono, herencia de un gobierno nefasto como el del PRD, que dirigió Ernesto Pérez Balladares.
Se supo que durante varios estudios de encuestas dizque serias, mucha gente rechazó siquiera ser entrevistado y algunos hablaron forzados por los periodistas.
De allí que consideramos poco fiable las encuestas y nos reservamos el posible ganador de las elecciones presidenciales.
Ya en 1999, hubo el caso que decían que una candidata presidencial estaba de segunda y que el candidato del PRD estaba de primero. Cuando vimos los resultados, ganó Mireya Moscoso y perdió Martín Torrijos.
�FRAUDE, UN FANTASMA DEL PASADO?
De igual manera, hay que observar el proceso electoral en la Junta Nacional de Escrutinio. Es allí donde se contarán los votos y se determinará quién ganó las elecciones. Aunque confiamos en gran parte del sistema electrónico del Tribunal Electoral, la posibilidad de que fuerzas desconocidas busquen favorecer a una nómica tal, puede ocurrir. Recordemos que hay saboteadores virtuales como "hackers" que pueden meterse en un sistema computacional y alterar los datos de las actas distritales.
Por ello, los observadores internacionales y locales, además de los representantes de la sociedad civil, así como los partidos políticos, deben vigilar que no hayan situaciones extrañas. Ojalá que los panameños acudan a votar y escoger al mejor candidato. Votemos, pues es nuestro derecho y un deber en una sociedad democrática.
