Eladio Fernández y su gremio están felices y dijeron estar siempre confiados en la palabra del presidente de la República, Ricardo Martinelli, quien les prometió un aumento de 50 dólares.
Ayer, Martinelli dijo que antes de diciembre llegará el incremento.
Sin embargo, a Fernández aún le queda un mal sabor en el paladar, cuando los directivos de la Caja de Seguro Social insisten en que se encuentran haciendo análisis financieros antes de tomar una determinación que pueda causar un impacto negativo en el programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVE), que el año pasado registró un déficit de $ 64 millones de dólares.
Fernández afirmó que Martinelli nunca dijo de cuánto sería el monto del aumento, pero manifestó que la mitad lo pondría el Gobierno y la otra mitad la CSS.
"Si el director de la CSS, Guillermo Sáez Llorens, no le hace caso a su jefe (Martinelli), entonces que se vaya para su casa", advirtió.
En tono molesto expresó: "�Cómo hay plata para los viajes?, y �cómo hay plata para comprar corredores?".
Añadió que siempre que los "miserables" jubilados piden un incremento para comer, los directivos de la CSS dicen que no hay forma de lograrlo, cuando en el Gobierno de Mireya Moscoso pudimos obtener un aumento.