Panamá no lució ayer tan ingenua, ni tan tonta...
Panamá se paró de "varón", anoche, ante la Argentina en el Estadio Brigadier López de la provincia argentina de Santa Fe.
La victoria de los "ches" por 3-1, es un resultado anecdótico, que no demuestra lo sucedido en el terreno.
Los goles albicelestes fueron anotados por Matías De Federico (27') y Gonzalo Bergesio, en dos oportunidades (39' y 84').
Para Panamá, descontó Nelson Barahona, a los 29 minutos.
Panamá impuso su rapidez y se paró como lo indican los libros: atrás y a esperar la iniciativa del anfitrión. Sin embargo, después de los 15 minutos, la "troop" de Gary empezó a animarse.
Por eso, cayó como balde de agua fría la ventaja de los "gauchos", a los 27: remate exquisito de De Federico que se metió pidiendo permiso a lado del segundo palo de Penedo. Sólo la forma justificaba el 1-0.
Pero la justicia parecía llegarle a la "roja" rápidamente. Sólo dos minutos después, Tejada se la dejaba a su "compa", para que este abriera hacia la llegada de Barahona quien la colocó cruzada. Nada pudo hacer Pozo. Era el empate.
Cuando las cosas parecían que se establizaban nuevamente, vino el segundo tanto "argento": Rivera se quedó en la marca y Bergessio se relamió en el aire para fusilar de un frentazo a Penedo: 2-1 para el "Pelusa" y sus muchachos.
Un error de Rivera devino en el tercer gol "pampeano": A los 84, pase filtrado y Bergessio que le gana la espalda al de San Francisco, para batir al meta nacional: era el 3-1.
Lo rescatable es la experiencia y que Panamá dejó el cuadro santafecino con un merecido respeto de parte del público argentino.