TEMAS DE ACTUALIDAD
"Mireya Moscoso una Presidenta, para el siglo XXI"

Por Carmen Donna Aven

Como mujer que me he agitado en la actividad política durante los últimos quince años, el triunfo obtenido por la señora Mireya Moscoso el pasado domingo 2 de mayo de 1999, tiene un significado realmente extraordinario, puesto que estoy viendo realizada una de las aspiraciones más importantes que como mujer tengo: ver conducir los destinos de la Nación Panameña a una de mi propio género, a una mujer.

No fue una elección más la del 2 de mayo, pues la misma es un hecho trascendental que marca un hito en nuestra historia, ya que por primera vez los panameños y panameñas nos dimos el derecho a escoger una mujer para que nos gobierne. Son muy pocos los países que han escogido una mujer como mandatario y Panamá ha entrado en ese concierto de naciones donde sus nacionales le han permitido a una mujer demostrar al mundo que puede dirigir los destinos de una Nación.

Felicito a todas las mujeres que optaron por darle su voto a Mireya Moscoso, como mujeres fuimos solidarias; sin embargo, quiero decir que me siento orgullosa de los hombres de mi país que echando a un lado viejos esquemas machistas prefirieron dar su voto a una mujer, a ellos los felicito doblemente.

Los años que han marcado el final del siglo XX han sido trascendentales para las mujeres en la búsqueda de la igualdad; hoy Panamá muestra al mundo que una mujer gobernará, que esa mujer recibirá conjuntamente con todos y todas el bien más preciado que tenemos: el Canal; igualmente presidirá el Centenario de nuestra patria. El triunfo de Doña Mireya simboliza el hecho de que los tiempos se están transformando y que el habitual desenvolvimiento de las mujeres se está modificando. Constituye un acto significativo, porque nos pone ante los ojos de la humanidad como un pueblo que está permitiendo la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, situación que muchas de nuestras congéneres desean para sus propios países.

Me siento inmensamente feliz del triunfo de Mireya Moscoso, porque no se trata solamente de que es una mujer, sino de la clase de mujer que es quien desde ya es nuestra Presidenta Electa. Como he dicho en anteriores escritos se trata de una mujer de apariencia menuda, que lo que no tiene en tamaño le sobra en voluntad, en coraje, osadía, valentía, arrojo, decisión, esfuerzo y valor; ya que hay que tener todas estas virtudes para competir por el puesto de elección popular más importante del país.

Los comicios electorales del pasado domingo nos demostraron que las mayorías optaron por quien no sólo les ofrecía el cambio, sino por quien desea ser la más fiel servidora de la Nación panameña, por quien no los olvidó, por quien habiendo perdido una elección regresó a todos los rincones de nuestra patria a darles las gracias a quienes la apoyaron y a seguir conociendo sus problemas en ese arduo caminar que algunos criticaron, sin darse cuenta que era el caminar, por quienes fueron escuchados y por quienes pusieron en esta mujer sus esperanzas de una vida mejor.

Las cortapisas que nos han sobrepuesto a las mujeres no fueron obstáculo para que Doña Mireya, alcanzara el triunfo y estoy segura que con su inteligencia, sentido común, capacidad, don de gente, amor y deseo de trabajar por Panamá, así como por ese don de la humildad que posee, cualidad difícil de encontrar en muchos y muchas, sabrá llevar a cabo un gobierno donde las favorecidas serán las grandes mayorías irredentas de este país. De ser así estaré doblemente satisfecha de haber creído en ella y de haber depositado mi voto a su favor.

Reitero lo que dije el Día Internacional de la Mujer, el uno (1) de septiembre de 1999 tendremos para orgullo de muchos panameños y panameñas a Doña Mireya presidiendo el nuevo gobierno y creo firmemente que lo hará dándole a la mujer el espacio merecido, gobernando de esta manera con un equipo de hombres y mujeres que pondrán lo mejor de cada uno y de cada una para hacer de nuestra patria un Panamá Mejor.

 

 

 

 

 

 




 

AYER GRAFICO
Aristides Vernaza toma posesión


CREO SER UN BUEN CIUDADANO
Sin embargo, no me protejo contra el SIDA


OPINIONES

 

PRIMERA PLANA | PORTADA | NACIONALES | OPINION | PROVINCIAS | DEPORTES | LATINOAMERICA | COMUNIDAD | REPORTAJES | VARIEDADES | CRONICA ROJA | EDICIONES ANTERIORES


 

 Copyright 1995-1999, Derechos Reservados EPASA, Editora Panamá América, S.A.