Cuando, dos semanas atrás empezaba una nueva edición del tercer Grand Slam de la temporada; la gran mayoría esperaba lo que ahora es una realidad.
Y es que ya es la tercera vez, que la final del torneo inglés, la disputan los mismos protagonistas. �Aburrido?
Si entendemos que esto quiere decir que no hay nadie que pueda igualar el poderío del suizo y el español; entonces, esta disputa es la más emocionante que el tenis pueda ofrecer.
En Londres, las entradas tienen precios de reventa que circulan los 2000 dólares. Quiere decir que la expectativa es grande.
Sobre todo, porque Roger viene con sed de revancha. Además, la derrota que le propinó el español al suizo en el último Roland Garros, en este escenario Federer tiene más argumentos para vengarla.
En el césped, el número uno del mundo se siente como pez en el agua, por eso es que en su camino hacia la final, no ha cedido un solo set.
Sin embargo, el mayorquín se ha vuelto más fuerte en todas las superficies y ha podido mejorar su técnica en el pasto.
La presión del actual campeón , por no perder su condición de líder de la clasificación, le han hecho trastabillar en muchos torneos de la actual temporada. Sin dudas, "Rafa" conoce cómo jugarle a Federer.
Quien obtenga mayor porcentaje con puntos desde el primer servicio, tendrá una leve ventaja. Ahí, el suizo es un maestro.
