Por su parte, el Ministro de Seguridad, José Raúl Mulino, afirmó que, salvo en Changuinola, el resto del país se mantiene en plena calma.
Mulino denunció que los indígenas están siendo embriagados en Changuinola para ser usados como "carne de cañón" y "tropa de choque".
"Estamos viendo la infiltración de elementos claramente identificados de la dirigencia sindical radical y de la oposición política", destacó Mulino durante una conferencia en la Presidencia de la República.
El Ministro de Seguridad confirmó que Saúl Méndez es el único dirigente sindical que tiene orden de arresto bajo los cargos de apología del delito. Le corresponderá al fiscal de la causa determinar si el directivo del SUNTRACS es arrestado o se le aplica cualquier otra medida cautelar.
El funcionario explicó que, contra Genaro López y otros siete dirigentes sindicales, lo que existe es orden de conducción.
Mulino expresó que el Gobierno tuvo conocimiento hace poco que, previo a los actos violentos de los manifestantes, se transmitió en una especie de señal de circuito cerrado de televisión, mensajes falsos sobre el contenido de la Ley N�30, lo que pudo haber sido el detonante de la anarquía en Changuinola.
"Esto lo hacen con el ánimo de que la crisis de Bocas del Toro, que se puede apaciguar por métodos civilizados, se prolongue para que empalme con el llamado a huelga del martes, convocada por FRENADESO y SUNTRACS", indicó.
