Cinco detenidos de nacionalidad colombiana, que están recluidos en el Centro Penitenciario La Joya, se cosieron la boca y se mantienen en huelga de hambre, en protesta al incumplimiento del Tratado sobre el Traslado de personas condenadas entre Panamá y Colombia.
Los detenidos se encuentran recluidos en el Pabellón 6 de La Joya, cumpliendo condenas por delitos relacionados con droga y exigen se trasladados a su país natal.
Sus nombres son: Gildargo Antonio González, Leonardo Ocampo Barón, Gonzalo Murillo Cataño, Jesús Jimmy Rosales y Yesit Izafar.
Se conoció que algunos de los reclusos colombianos requieren de atención médica especial, que no pueden ser debidamente atendidas en nuestro país.
REUNION CON LA DEFENSORIA
Ante esta situación, el Primer Adjunto de la Defensoría del Pueblo, Ricardo Vargas, mantuvo una reunión con los reclusos, quienes aseguran haber cumplido con las dos terceras partes de sus condenas y tener disponibilidad de pagar sus pasajes, para cumplir sus respectivas condenas en Colombia.
Los detenidos también afirman haber contactado a médicos colombianos dispuestos a viajar a Panamá para prestarles atención requerida, sin embargo sus permisos no fueron autorizados.
Vargas, agregó que la situación que se vive en las cárceles del país continúa siendo crítica y que de esto no escapan los extranjeros detenidos.
"El hacinamiento en los centros penitenciarios, la necesidad urgente y adecuada de atención médica, son algunas de la razones que llevan a los detenidos a tomar determinaciones tan radicales".
El funcionario manifestó que existen informes que de unos 60 detenidos señalan haber cumplido con los requisitos necesarios que hacen posible que se cumpla el Tratado de Traslado de Personas Condenadas entre Panamá y Colombia.
Actualmente hay cinco colombianos que se mantienen con la boca cosida y en huelga de hambre.
Sin embargo existen advertencias de que otros se unan al grupo, en apoyo a la solicitud de repatriación que han hecho ante las autoridades.