ABRACADABRA
"15 de agosto"
 "Recuperar el patrimonio nacional
de los piratas que actualmente lo tienen secuestrado exige un esfuerzo patriótico
por parte del pueblo panameño"
Carlos Guevara Mann
Asunción de la Santísima
Virgen María. Fundación de la Ciudad de Panamá (1519).
Natalicio de Arnulfo Arias (1901). Apertura del Canal de Panamá (1914).
El 15 de agosto es, sin duda, una fecha especial para el pueblo panameño.
Al conmemorar las efemérides del día, sin embargo, tropezamos
con los obstáculos que a nuestro paso han dejado la narcodictadura
militar y la torodictadura de hoy, empeñada en quedarse en el poder
por toda la eternidad a través de la "reelección presidencial
inmediata".
A pesar de los esfuerzos que panameños conscientes han realizado
por preservar el conjunto monumental de Panamá la Vieja, a través
de su rescate y declaración como Patrimonio de la Humanidad, la torodictadura
ha dispuesto que el Corredor Sur lo arruine para siempre.
Al imponer su alineamiento frente a Panamá la Vieja, el Corredor
pondrá fin al carácter marítimo de la primera sede
de nuestra Capital, todo por el afán de la torodictadura de proteger
las pingües ganancias de la constructora mexicana ICA, en detrimento
de los intereses nacionales.
En cuanto al Canal y sus áreas adyacentes, la situación
es similar.
Para favorecer a sus allegados, la torodictadura ha convertido los bienes
revertidos en una "piñata" y planea hacer lo mismo con
el Canal cuando éste pase a manos panameñas, el 31 de diciembre
del año entrante.
Así lo demuestran los escándalos de la asignación
de viviendas de la ARI y la concesión portuaria de la Hutchison,
como también el nombramiento, como directores de la Autoridad del
Canal, de individuos íntimamente ligados a la torodictadura.
Con el manejo de estos bienes sucedió lo que el Dr. Arnulfo Arias,
en su discurso de toma de posesión del 1 de octubre de 1968, vislumbró
que ocurriría si no lográbamos adecentar el manejo de la cosa
pública antes de abordar el tema del canal.
En esa ocasión dijo el Dr. Arias:
Debemos tener presente que la fuente de nuestra autoridad para resolver
nuestros problemas internacionales reside en nosotros mismos. Mal pueden
tener solución nuestras divergencias con otros países, si
no nos revestimos de autoridad moral y si no procedemos con acierto a poner
primero nuestra casa en orden.
La equidad prudente y la autoridad atinada deben tener comienzo en nosotros
mismos, porque esto es lo que nos hace respetar por parte de los demás
países, y lo que les da fuerza a nuestros argumentos y a nuestros
reclamos. Tenemos que vivir dentro del orden a fin de no sólo tener
el derecho sino también la autoridad para exigir que se nos reconozca
lo que nos corresponde (ver Golpes y tratados, de Brittmarie Janson Pérez
[Panam: IEPI, 1997], pág 127).
La casa no se pudo poner en orden, como se disponía a hacerlo
Arnulfo Arias en 1968, porque para evitarlo la Guardia Nacional lo derrocó.
Entonces, con la colaboracin de elementos civiles desnaturalizados -
que hoy, nuevamente, están en el poder - la narcodictadura militar
se dedicó a saquear al Estado panameño, incluyendo las propiedades
que los norteamericanos comenzaron a entregarnos a partir de 1979.
Esa misma "política" del saqueo es la que impera hoy,
y la que prevalecerá entrado el siglo XXI, si los panameños
permitimos que la torodictadura siga en el poder a través de la "reelección
presidencial inmediata".
Recuperar el patrimonio nacional de los piratas que actualmente lo tienen
secuestrado exige un esfuerzo patriótico por parte del pueblo panameño.
Primero hay que derrotar a la torodictadura en el referéndum reelectorero.
Para poner la casa en orden, hay que votar NO el 30 de agosto.
Después habrá que emprender otras acciones, pero lo primero
es votar NO.
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