"Soñaba con mi jubilación y no precisamente para cuidar nietos" asegura la señora Bibi, quien tiene diez años de haberse jubilado y asegura estar disfrutando su vida al máximo.
Cuenta que su esposo y ella son maestros jubilados, y que se jubilaron a temprana edad al igual que un grupo de amigos. Por ello, decidieron crear un club, eso sí, que el dinero recaudado solo fuese para pasear. "Nos reunimos y hacemos actividades durante todo un año, los fondos los utilizamos para irnos de paseo los días de Carnaval", manifestó.
Fue clara en asegurar que no sólo pasean en una fecha determinada, todos los meses se reúnen en las diferentes casas de los socios donde charlan, bailan y juegan dominó. "La pasamos muy bien, cuando van a mi casa tengo las cervezas bien fría y la salsita de antaño para recordar los buenos tiempos", relata.
Según la señora Bibi, también organizan otras actividades como ir al Causeway, a Chepo o lugares turísticos donde puedan pasear y divertirse sin que les cueste mucho.
Para crear fondos para su paseo anual, su actividad principal son los bingos, con los que no sólo recogen dinero si no también se divierten y pasan un rato ameno. "Los de la tercera edad no estamos para estar metidos en discotecas, la vida ya no es la de antes, ahora hay mucha violencia", dice.
PASEO EN PAREJA
Muchos creen que con el pasar de los años el amor en la pareja muere, este es un viejo mito que los socios de este club han roto. "En este club que tiene seis años de haberse fundado estamos puras parejas, somos como siete matrimonios", cuenta.
Asegura que esto les ayuda como esposos a renovar el amor, a distraerse juntos y hacer cosas que no hacían desde que eran aún jóvenes. "Mi esposo no es un hombre muy sociable, pero como estos eran nuestros amigos desde que empezamos en el magisterio, disfruta mucho y me hace sentir muy bien", finalizó.
