Cansados de la violencia, niños y adolescentes de Colón solicitaron paz, para así poder vivir tranquilos en un ambiente sano.
Los niños se pusieron suéter blanco, además, portaban pancartas y banderolas blancas por toda la avenida 8 Meléndez.
Karen Acosta, directora de Casa Esperanza en Colón, mencionó que le preocupa la violencia en las calles, sobre todo porque en el lugar donde funciona este centro se dan muchas balaceras, lo que representa un peligro.
A esta acción cívica, se unió la Iglesia de Dios y los profesionales chinos-panameños, que también solicitan la cultura de la paz, por el bien de los propios colonenses.