La selección brasileña que se medirá a Chile y a Bolivia por las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Sudáfrica 2010 se concentró desde ayer, aún sin el atacante Robinho, en la ciudad serrana de Teresópolis.
Robinho, que había viajado a Londres para conversar con los dirigentes del Manchester City tras haber sido transferido a última hora a ese club inglés por el Real Madrid español, era el único ausente en la tarde de ayer en la Granja Comary, la sede campestre que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) tiene en Teresópolis, a unos 100 kilómetros de Río de Janeiro. La Confederación Brasileña de Fútbol esperaba que Robinho se sumara al resto del elenco ayer en la tarde.
