El técnico del Manchester United, Sir Alex Ferguson, acusó ayer al delantero español del Liverpool, Fernando Torres, de querer provocar la expulsión de un rival con una caída deliberada dentro del área que benefició a los "reds" con un penalti.
"Definitivamente Fernando Torres sacó tajada de ello. No hay duda de que él estaba intentando que expulsaran al jugador (John O'Shea)", señaló Ferguson tras la victoria de su equipo en Old Trafford (3-2).
Frente a las acusaciones de Ferguson, el entrenador de los "reds", Roy Hodgson, aseguró que prefería hablar del partido y sobre "los asuntos" que realmente le interesan y evitó así manifestar su opinión sobre si la jugada había sido o no penalti.