Jueves 24 de sept. de 1998

 








 

 

EDITORIAL
Acusación Filipina contra Panamá

El semanario "El Boletín", impreso especializado en asuntos marítimos y canaleros, cuya respetabilidad nadie cuestiona, recoge a titulares la protesta que la Unión de Marinos Filipinos (UFS) formula contra nuestro país, resultante de manipulaciones en las normas que establecen los requisitos de competencia para ejercer oficio de marino, en naves panameñas.

De acuerdo con la querella, Panamá alteró para sus propios beneficios las exigencias del Registro Panameño de Naves al aplicar restricciones a los certificados temporales de competencia que respalda la idoneidad laboral de las tripulaciones; documento identificado en el mundo marítimo con las siglas TCC.

El signatario de la acusación, Nelson Ramírez, Presidente de la entidad gremial filipina, sostiene que Panamá redujo arbitrariamente el período de validéz del TCC, de doce a ocho meses, para de esa manera "sacarle más dinero a la gente"; para respaldar tales afirmaciones señala que en dos años los trabajadores del mar deben renovar el certificado tres veces, lo que se traduce en desembolso de seiscientos noventa balboas, en vez de los cuatrocientos sesenta que cancelaban con anterioridad.

La querella del sindicato filipino resalta que la decisión aplicada por Panamá "no añade, no agrega nada a la seguridad internacional en alta mar", y es simplemente una excusa para esquilmar estos dineros.

Por otra parte reclama el quejoso gremialista la decisión panameña al desconocer la idoneidad de los certificados de competencia standard que emite Filipina y exigir la obtención del panameño, lo cual, en el entender de los agremiados, conforma "un robo a la luz del día", sin detenerse a valorar que la documentación filipina es aceptada sin reservas por otros Registros Navieros, entre ellos, el Reino Unido, Liberia, Holanda, Noruega y Bahamas.

La renovación de los certificados de marinos en naves bajo bandera panameña ha sido desde hace varios años materia de censuras y críticas, cuando personeros de la dictadura norieguista, de cercano parentesco con el sátrapa, recibieron las autorizaciones para expedirlos, materializándose entonces un codiciado y rentable negocio que sirvió de sinecura a favoritos del régimen.

Las relaciones marítimas panameñas con Filipinas transitan hoy un difícil momento, cuando esa nación anuncia que requerirá de Panamá el traslado de jurisdicción de los casos judiciales que promuevan marinos de aquella nacionalidad; acción que según las estimaciones de "El Boletín" desviará millones de dólares en litigios, desde Panamá a las Filipinas.

Las autoridades fiscales tienen la responsabilidad de atender estos asuntos, con prontitud y desvelo, evitando que los esfuerzos realizados para crear la Autoridad Marítima de Panamá, resulten negados por decisiones improvisadas de sesgos sospechosos, que funcionan contra los intereses marítimos nacionales.

 

 

 


 

AYER GRAFICO
Conjunto "Bella Luna", de Ceferino Nieto, en sus inicios en el año 1949, en Chitré.


CREO SER UN BUEN CIUDADANO
Sin embargo, manejo desordenadamente.


OPINIONES



 

 

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