Desesperación e incertidumbre es lo que reflejan los rostros de los moradores de Cerro Tigre, Arraiján. Han sacando al patio lo poco que les quedó luego de la inundación de antenoche, cuando la lluvia los azotó.
Más de 50 personas resultaron afectadas en esta comunidad de Panamá Oeste, y muchos han reiterado que quieren abandonar el lugar para tener una mejor vida .
En medio del ajetreo que tenían los adultos, sacando colchones, sillas y mesas, para que los rayos del sol calienten lo mojado, un grupo de niños ayudaban en lo que podían, pero muy tristes.
Los menores no pudieron ir a clases el viernes, porque la mayoría de los útiles se les mojaron.
Los residentes de Cerro Tigre le piden a las autoridades que por favor los ayuden. No es para menos, es la segunda vez en este año que les sucede.