Semidesnudo, lavado en sangre y con múltiples golpes en la cara fue encontrado el cuerpo de José Manuel Navas, de 49 años, dentro de su casa en Las Guías de Occidente, en Antón, la mañana de ayer, domingo.
En la vivienda estaban su padre enfermo y sus hermanos.
"Hito", como le llamaban, llegó a la casa la noche del sábado después de haber ingerido licor, pero no estaba muerto, porque conversó con ellos, y en la mañana estaba muriendo.
Según dijo Augusto Navas, padre de la víctima, la noche del sábado él conversó con "Hito" sin problemas, aunque estaba tomado. Se recostó al sillón para dormir. En la madrugada escuchó ruidos.
José Manuel era quien cuidaba de sus hermanos discapacitados y de su padre. Sus familiares no saben quién lo asesinó. "Era un hombre que hacía daño a nadie".
Navas confeccionaba redes.
Las autoridades presumen, de manera preliminar, que fue asesinado dentro de la casa al lado del cuarto de su padre, que casi no ve.
El Ministerio Público investiga. No se descarta la posibilidad de que haya sido golpeado salvajemente en el rostro antes de llegar a casa, donde murió, pese a que su padre asegura que conversó con él, que vio la televisión y no estaba herido.
Los vecinos temen que delincuentes estén acechando para acabar con la vida de los más humildes por unos cuantos dólares. No se explican qué más pudo haber causado la muerte de José Manuel.
Navas confeccionaba redes. Era trabajador y se dedicaba a velar por su padre y hermanos, que ahora quedaron desamparados.