La falta de seguridad los obligó a suspender el servicio de buses en la ruta Veranillo por unas cuatro horas, ante la ola de asaltos en la cual han sido las víctimas.
Los conductores y ayudantes paralizaron las unidades rodantes en demanda de una mayor vigilancia policial dentro de la piquera y en los alrededores, especialmente en el sector conocido como "La Pesa", lugar donde se reporta la mayor cantidad de robos a manos de menores de edad.
Omar Quintana, representante de la piquera de buses de Veranillo, dijo que" los maleantes ya no tienen hora para cometer sus fechorías ni respetan a nadie. Nos sentimos desprotegidos".
Los usuarios tampoco se salvan de la escalada de violencia; a ellos también les roban, indicó el entrevistado.
" Nos hurtan celulares, relojes y dinero", afirmó Quintana.
Apuntó que esos asaltantes provienen de la propia comunidad y que su captura será más fácil para la Policía, conociendo de dónde vienen.
En tanto, un miembro de la Zona Policial de San Miguelito aseguró que incrementarán las rondas policiales, pero advirtió que los conductores también tienen que hacer su parte y es denunciar a los delincuentes.
Por otra parte, Lázaro González, funcionario de la Autoridad Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT), expresó que se han programado reuniones entre los dirigentes transportistas, representantes de la institución de transporte y unidades policiales, a fin de diseñar estrategias de seguridad y neutralizar a los malhechores.
González dijo que lo que menos desean es que los transportistas se tomen la justicia por sus manos ante la falta de seguridad y por eso intervendrán para que la situación no se salga de las manos.
Hay que resaltar que desde la propia piquera de Veranillo se han reportado situaciones delictivas y abatido a tiros a uno de los choferes.