"Súper contento", esto fue lo que respondió Nicanor Villarreal, al preguntarle cómo se sentía de estar nuevamente en suelo panameño.
El chiricano que participó en Bailando por el Mundo Internacional, llegó el martes en horas de la noche al Aeropuerto de Tocumen.
En cuanto a los ganadores, dijo estar de acuerdo con México, pero no con Ecuador, pues no sacaron su quebradita, no la terminó y prácticamente la mitad fue improvisada.
El chiricano que era esperado por su amorosa novia María Elisa, dijo que en la decisión de la salsa, fue un "robo a mano armada", pues hasta los jurados se mostraron molestos.
"Fue muy difícil y hubieron muchos momentos en que tuvimos que sacar las garras y demostramos que le pudimos ganar a Rumania en el duelo de tango, y a México en un duelo de reggaetón", afirmó.
Al preguntarle sobre los rumores de que le pondrán una academia para que enseñe baile, nos dijo que hasta el momento no hay nada seguro, pero que escuchó en diferentes medios algo relacionado con el tema.
Esa noche también llegó la jueza Mireya Navarro, a quien esperaban sus hijas Dominira, Igli y Lais.
Al preguntarle sobre cómo consideraba las opiniones de los medios en cuanto a su calificación, dijo que entre las jurados fue la más justa, porque ese fue su objetivo.
Además reconoció el trabajo de los bailarines panameños, pues considera que la competencia no fue fácil.