La fiesta de "Ashura", la más importante y sagrada del calendario islámico chií, se tiñó de sangre en Irán, donde se recrudecieron los violentos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y grupos de la oposición pro reformista, en los que han muerto al menos cuatro personas.
Según el sitio Internet "Nasimfarda", tres personas perdieron la vida en los intensos choques registrados en la emblemática calle "Enguelab" y una cuarta en el cruce con la calle Kalej, también en el centro de la capital iraní.
Teherán y otras ciudades como Isfahan amanecieron tomadas por las fuerzas de Seguridad este domingo, día en el que los chiíes celebran "Ashura", la festividad más importante de su calendario religioso.
Cientos de efectivos de la Policía antidisturbios, acompañados por milicianos basij, se han desplegado en las principales plazas y calles del sur de la capital.
Los sitios web reportaron asimismo que efectivos de la Policía y de otras fuerzas dispararon gases lacrimógenos contra un grupo de personas que se concentraron en los alrededores de las principales arterias de Teherán.
El sábado, día previo a la gran procesión que se celebra en recuerdo del asesinato en el año 680 de Husein, nieto del profeta Mahoma, ya se registraron enfrentamientos entre la Policía y grupos de partidarios del movimiento de oposición "verde" reformista.
Según páginas web, las fuerzas de seguridad emplearon gases lacrimógenos, porras y disparos al aire para hacer frente a los manifestantes tanto en el centro de Teherán como en la ciudad de Isfahán, en el centro del país.
DETENIDOS
300 personas fueron detenidas y decenas de miembros de la fuerza de seguridad resultaron heridos.