Wantón

El hombre observaba el lugar donde vivían los otros. Tenían más comida que ellos. Sus mujeres se veían trabajadoras. Entonces él y sus compañeros decidieron atacar el poblado. Luego de un momento de feroz lucha, dominaron a los otros. Se robaron todo lo que pudieron, incluyendo varias mujeres. Esto ocurrió hace miles de años en Europa, al comienzo de la civilización. Años atrás, unos animales comenzaron a cambiar. Dejaron los árboles, caminaron en dos patas y su cerebro se desarrolló.

Entonces los pequeños grupos de esos seres, por necesidad según algunos sociólogos, dieron inicio a las guerras. En esa época primitiva se peleaban por la comida (riqueza). Han pasado miles de años, y han cambiado los métodos de guerra, pero no sus causas. Un análisis de los conflictos sociales, ocurridos hace años, muestra que casi todos se debieron al deseo de acumular riquezas que algunos consideran símbolos de poder. Estuve pensando en esto por la situación en que se encuentra Panamá y la China comunista.

Los chinos y norteamericanos llegaron al país casi juntos, con diferentes intereses. Los gringos eran los patrones y los chinos sus empleados. Estados Unidos expandía su poder económico y militar por el mundo, convirtiéndose en la primera potencia. Los chinos se pasaron años en Panamá, trabajando mucho. El chino que conocimos por bastante tiempo, era el de la tienda de la esquina, el de la lavandería y el de los restaurantes de Wantón.

Estados Unidos obtuvo de Panamá todas las ventajas logísticas, militares y económicas que quiso. Mientras tanto, los chinitos fueron extendiéndose en el comercio, y formaron una importante sociedad de extranjeros. Junto a ellos, estaban los afroantillanos. Más tarde en este crisol de razas, se destacaron los árabes, griegos, israelitas, indostanés, italianos y otras nacionalidades. Por la historia hemos tenido “una vida norteamericanizada”. Mientras tanto, la China fue cambiando. Ahora es una potencia económica que trata de conquistar los mercados norteamericanos. En esta “pelea de gallinas, Panamá es cucaracha”, dijo el Cholito Mesero de Santana...