Billetero perdió combate contra la muerte
Marín fue atacado violentamente el pasado 15 de diciembre del año en curso en el sector de Macano del distrito de Boquerón.
El vendedor de chance y billetes Pablo Marín Concepción, de 57 años, no logró soportar los golpes en su anatomía a manos de delincuentes para asaltarlo, por lo que se decretó su fallecimiento la noche del pasado viernes, tras permanecer recluido en el hospital Rafael Hernández, en la ciudad de David, provincia de Chiriquí.
Marín fue atacado violentamente el pasado 15 de diciembre del año en curso en el sector de Macano del distrito de Boquerón.
Concepción, producto de los fuertes golpes que recibió, para lo que no se descarta que utilizaron el arma de fuego que llevaban para amenazarlo, se hallaba desde esa fecha en la Sala de Cuidados Intensivos del citado centro hospitalario en David, luego de haber sido intervenido quirúrgicamente.
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Según el hijo de la víctima, quien lleva el mismo nombre de su padre, el día de los hechos, los sujetos golpearon a su progenitor y lo despojaron del dinero en efectivo, prendas y más de mil balboas de chances y billetes de lotería extraordinaria que en ese momento vendía, asignada para el sorteo del día domingo 16 de diciembre.
Según el reporte de las autoridades, el billetero se encontraba en un bar del sector de Macano de Boquerón, del que salió para ir hacia su vehículo, fue en ese momento que los sujetos lo atacaron llevándose todas las pertenencias de la víctima, a la que dejaron tirada en el pavimento inconsciente producto del golpe, para después darse a la fuga.
Una vez se da el hecho, los familiares del billetero reportaron el robo de los billetes a la agencia de la Lotería Nacional de Beneficencia para que no se diera ningún tipo de circulación de los mismos.
Las autoridades en la provincia de Chiriquí continúan las investigaciones para esclarecer este robo a mano armada, ya que todo indica que fue golpeado con la cacha del revólver registrado en el distrito de Boquerón, donde el billetero perdió la vida. Los atacantes siguen libres.