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TEMAS DE ACTUALIDAD
La legislatura
Ferm�n Agudo Atencio
Estamos prestos para el cambio. Los pueblos aletargados que sufren de continua somnolencia, pocas veces perciben el ruido estremecedor que provoca la muerte de un a�o viejo y el advenimiento del nuevo. Son acontecimientos para meditar, llevarse ambas manos a la cabeza, pensar profundamente y analizar. Yo veo el Parlamento, como el recinto donde se encuentra recogido el pensamiento de la Naci�n, foco fulgurante de las ideas, ebullici�n constante de proyectos en funci�n. Vestido que en operaci�n de ampuloso modisto coloco sobre el fresco y lozano cuerpo de la Asamblea Legislativa. Estas cualidades inalienables de proporciones inconmensurables, nos f�an las esperanzas de d�as mejores. Raz�n que nos impulsa a estar pendientes de sus comportamientos en las lides por el cumplimiento de los m�s sanos intereses de los conglomerados que los prefirieron. Como todo cuerpo, est� integrado por elementos dis�miles, completamente heterog�neo y, el proceder de sus integrantes, tambi�n obedece sin dudas a las diferencias individuales y a las presiones de sus partidos y a los grupos nacionales que los llevaron a las butacas del Parlamento. Los legisladores deben tener cuidado con lo que dicen y c�mo lo dicen, con lo qu� hacer y c�mo lo hacen, valga la muletilla pero, as� es. Aqu� no tenemos escuela para pol�ticos, no s� si en otras partes del mundo existen, pero ser�a lo ideal, haciendo los actores independientes, encausando los asuntos adecuadamente sin la intervenci�n de mucho asesoramiento. Por el semic�rculo han desfilado desde agricultores, hasta h�biles doctores en Derecho y Ciencias Pol�ticas y qui�rase o no, son diferencias muy arduas de dirimir, aunque a veces nos sobreviven las sorpresas. De all� se han lanzado afirmaciones de diversos matices, ajust�ndose al instante en que han sido dichas; algunas con el peso de la discreci�n, que se mezclan con la decencia y el recato, otras faltas de asidero o de prudencia. Desde all� y tra�da por los cabellos, alguien parangon� las tretas de un pol�tico criollo con las haza�as inmortales del Libertador Sim�n Bol�var. Un legislador no debe ser v�ctima de las pasiones y de presentarse una situaci�n irregular donde empiece a reinar el caos, �l inteligentemente debe dar paso a la mesura y a la oportunidad con verg�enza. Recuerden que el pueblo lo est� mirando y que un traspi�s puede convertirse en un saldo pendiente. No soy apto para escribir chistes y tal vez lo que voy a decir puede sonar como chister�a, he aqu� mis planteamientos: �Cu�ntos presupuestos se han aprobado desde 1904 hasta el a�o 2001? �A cu�nto asciende el acumulativo negativo al d�a de hoy? �Por qu� ha tomado el car�cter de impagable nuestra deuda externa, siendo nuestro pa�s tan peque�o y de escasa poblaci�n? No llegamos a tres millones y este a�o nos jactamos de tener un presupuesto que sobrepasa los cinco mil millones de d�lares. Si esta suma la dividen entre el n�mero de habitantes, cada paname�o ser�a millonario, hasta los ni�os de pecho. Uno a�o m�s que pasar� sin penas, ni glorias para nosotros.
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