Parece contradictorio que con el incremento que registra la actividad turística en la provincia de Chiriquí, la principal puerta de entrada en el sector fronterizo de Paso Canoa esté inundada de basura, maleza y malos olores producto de las aguas servidas.
La preocupación se hace más evidente, cuando turistas extranjeros ingresan al país por esta área y lo primero que observan es la gran cantidad de bolsas de basura, lo cual contrasta con los hermosos paisajes naturales y lugares de interés que se pueden observar en otros puntos de la provincia.
Un grupo de transportistas de carga manifestó que desde el pasado diciembre se vienen acumulando los desechos sólidos en distintos puntos de la frontera; lo que provoca con el pasar de los días olores nauseabundos que causan malestar en las personas que a diario transitan por este sector.
Expresaron que es necesario que las autoridades locales le pongan atención a esta problemática y establezcan un adecuado sistema de recolección de la basura; ya que esto puede afectar la imagen de todo el país ante la mirada de los turistas.
Cabe señalar que recientemente, un nutrido grupo de turistas norteamericanos, que viajan en carros casas por todo el continente, ingresaron a Paso Canoa; y lo primero que observaron fue ese desorden.
Por el aire acondicionado que llevaban en las cabinas de estos autos, pasaron desapercibido los malos olores, pero les sorprendió el cerro de basura.
"Eso le da mal aspecto a la entrada principal de Paso Canoa; se debe buscar un mecanismo para que se pueda sanear el área", opinó el señor Norberto, un residente de esta comunidad.
La falta de limpieza afecta el negocio de estacionamientos de carros que hay en Paso Canoa, con el que se ganan la vida varias personas.
