Advierten sobre posible colapso judicial
tras fin de justicia "sin rostro"
Bogotá
AP
A pesar de dificultades y
obstáculos, el gobierno y la insurgencia deben elaborar una agenda
de negociaciones a partir del 20 de abril, afirmó la ex canciller
María Emma Mejía, una de los cuatro delegados oficiales en
las conversaciones con los rebeldes.
``Hay que poner toda la fe a que el proceso de abril se reencarrile
y que de alguna forma podamos avanzar en lo que es nuestra tarea: el tema
de conformación de una agenda común'', dijo Mejía en
conversación telefónica con la AP.
Para el 20 de abril se prevé en una localidad del sur del país
la reanudación de contactos entre los voceros gubernamentales y los
tres delegados de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
(FARC), la guerrilla más grande del país con unos 15.000 miembros.
Tras instalarse el 7 de enero una mesa de diálogos, las FARC suspendieron
menos de dos semanas después los contactos alegando que para poder
seguir adelante se requerían pruebas de la lucha oficial contra los
grupos paramilitares.
Sin lograr en las primeras reuniones un acuerdo sobre un temario inicial,
las partes, entonces, acordaron el encuentro de este mes.
Mejía expresó su confianza en que los voceros de las FARC
llegarán a la reunión de abril dispuestos a discutir temas
de una agenda. No comentó si el gobierno decidiría una nueva
prórroga de la denominada 'zona de distensión', o 42.000 kilómetros
cuadrados al sur del país sin presencia de fuerza pública,
y donde se realizan los encuentros de las partes.
Esa zona, exigida por las FARC como garantía de seguridad para
sus voceros, entró en vigencia el 7 de noviembre y por 90 días.
El gobierno del presidente Andrés Pastrana acordó su extensión
por otros 90 días el pasado 5 de febrero.
Esa nueva reunión ``es una oportunidad importantísima,
no sólo para las partes, para el gobierno, para la insurgencia, sino
para el país...esta es una oportunidad que la no podemos dejar pasar,
aunque las circunstancias sean difíciles y complejas'' , agregó
Mejía.
``Estamos a puertas de reiniciar un proceso muy importante y obviamente
no podemos defraudar a nuestras gentes, a nosotros, o ellos'', dijo refiriéndose
a las expectativas que hay en el país sobre poder llegar a una agenda
común con los rebeldes y avanzar eventualmente en una negociación
de paz que ponga fin a casi cuatro décadas de conflicto interno.
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