CARLOS SERRANO REPRESENTO A "EL MARTIR DEL CALVARIO"
Una entrevista con "Jesús"
Omar Wong Wood
Crítica en Línea
Fue difícil entrevistarlo,
tardé mucho tiempo para comunicarme con él, pero un buen
día me llamó inesperadamente para concederme la entrevista,
en la cual hablaríamos de todo un poco, pero sobre todo de la humanidad,
de sus pensamientos y lo que desea en el futuro.
El día de la entrevista solicité el apoyo de un fotógrafo,
sería imperdonable que no le tomáramos foto, para que nuestros
lectores conocieran sus facciones, sin embargo, como cosa del destino,
gracias a lo enredado de la dirección del entrevistado, el fotógrafo
llegó tarde y por consiguiente yo también, pero la entrevista
se efectuó.
Al iniciar la entrevista le pregunté: ¿Cómo eres
internamente? Y respondió: "Al contrario como la gente cree,
soy alegre, servidor, innovador, soñador, dejé de ser celoso",
agregó con orgullo, "turbulento, serio en las cosas del amor,
honesto, verdadero, enamoradizo del amor, y realmente sólo espero
de las demás personas que sean honestas consigo mismas".
Continué, y por mi incansable mente revoloteaba una pregunta:
¿Qué sentirá Carlos Serrano Serracín, un actor
de 35 años, cuando representó a Jesús en la obra "El
Mártir del Calvario", presentada por la parroquia la Divina
Misericordia que dirige el padre David Cosca, en la cual intervinieron aproximadamente
260 personas entre actores, músicos y personal de planta, convirtiéndose
en la obra de teatro más grande que se ha escenificado en nuestro
país?
Sonriendo y con los ojos brillantes dijo: "Hay que ponerse los pantalones
para hablar de eso". Como persona opino que es extraordinariamente
grande, es enseñanza, caminos, todo en una sola cosa, es un golpe
fulminante, pero de fe, alegría y gozo.
Como actor aseguró que el papel de Jesús fue el más
difícil de interpretar en su carrera de alrededor de 15 años
de vida en el teatro, "es un personaje difícil de interpretar,
para emular la forma tan carismática en que El vino a traer su mensaje".
Para hacerlo, confesó que se pasó horas y días viendo
películas por cable sobre la vida de Jesucristo, para entender la
forma en que vivió y se compenetró con la gente que le quería
y porqué molestaban a los judíos del Salvador, además
de leer libros sobre el tema.
De pronto, la tierna mirada de una mujer, a la que a la vista los años
le han pasado, pero por dentro no parece, quizás el tiempo se olvidó,
"apareció, ésta era la madre de Carlos, la señora
Pura Serracín de Serrano, que nos traía un delicioso jugo,
mientras hablábamos".
Hacer el personaje de Jesús me cambió en todo sentido,
exclamó Carlos gustosamente. Antes de hacer el personaje de Jesús,
Carlos Serracín era uno, después fue otro, aseguró.
Era introvertido, que sólo vivía para eso, vivir, respirar
y comer, y de vez en cuando querer a alguien, pero ahora afirma que todo
eso cambió, el Carlos de hoy en día pretende entrar a la historia,
indirectamente, que la gente lo recuerde por sus interpretaciones y dejar
el mensaje de Dios.
Pero explicó que no pretende ser un salvador, ni pretende salvar
a nadie, "todos tienen derecho de salvarse a sí mismos, cada
cual se salva por sí solo".
Dijo que nunca ha pensado en el sacerdocio, siempre su interés
estuvo rodeado de la actuación, "mi vocación religiosa
está dentro del teatro, en donde de repente puedo dejar plasmado
el mensaje de Jesús".
|
|
Retraso en el sistema democrático, ocasiona
sanción impuesta a EPASA
EPASA recibe apoyo del pueblo panameño
Capturan a traficantes de droga en la comarca
Kuna Yala
Invierten 5.4 millones de dólares en región
de Azuero
"Puertas Abiertas" recibe a 102 indigentes
capitalinos
Población debe ser parte de soluciones |