Hoy, 14 de abril, es un día de mucho simbolismo para quienes se embarcan en cruzadas al estilo del Quijote, siguiendo un oscuro camino. Pese a que se les advierten sobre la realidad de las cosas, no llegan a nada bueno al final.
Le doy varios ejemplos. Un 14 de abril de 1865, el presidente de Estados Unidos, Abraham Lincoln, fue advertido por su secretario personal de que no debía ir al Teatro Ford, por su seguridad. El terco mandatario corrió el riesgo de asistir al evento cultural. Esa noche, fue asesinado en su palco.
Un 14 de abril de 1986, el líder libio Muammar Al-Gadafi, estaba en su casa con su familia, en Trípoli, en claro desafío a lo que sus guardaespaldas le habían recomendado: No debía estar en público, porque sería blanco de sus enemigos. Igual, esa noche, aviones de EE.UU. bombardearon Libia, incluso su casa. Murió su hija.
Empero, quiero destacar un incidente ocurrido también un 14 de abril de 1912. El majestuoso transatlántico "Titanic" cuyos constructores decían que jamás podía ser hundido, sufrió un accidente catastrófico al chocar con un iceberg, en pleno océano. Esa noche, unas 1, 200 personas fallecieron.
Muchos analistas políticos en Panamá hicieron mofa del incidente del "Titanic", como una forma de comparar aquellas campañas políticas que se dan por ganadoras, y que el día de las elecciones sufren la mayor humillación ante el electorado.
A escasas dos semanas de los comicios del 3 de mayo de 2009, parece haber otra campaña política que parece hacer aguas ante un inminente embate de las fuerzas "naturales" del Estado. Es decir, el ciudadano común y la fuerza de la razón.
Igual que el "Titanic", el que se consideraba ganador indiscutible de la Alcaldía de la ciudad de Panamá, Bobby Velásquez Jr., enfrenta el mayor desafío ante la cuasi desaparición de la campaña del opositor Bosco Vallarino, acusado de tener doble nacionalidad y haber renunciado a sus vínculos ciudadanos con Panamá.
Una advertencia de que el camino para Bobby Velásquez no está despejado todavía, fue un sondeo que realizó la semana pasada el periodista Alvaro Alvarado en "Debate Abierto". La pregunta era: �Usted por quién votaría, si inhabilitan a Bosco?
La sorpresa fue grande, pues ganaba Miguel Antonio Bernal, por un 32%, Bobby Velásquez tenía 31% y Roxana Méndez, la suplente del Gordo Urbano, tenía 28%. Es decir, un empate técnico cardíaco en la carrera alcaldicia. Luego, por factores logísticos obvios, los "call centers" de los candidatos viciaron el sondeo electrónico de RPC TV, cambiando todo el resultado.
Otros sondeos en universidades, centros comerciales, empresas y en los medios, han venido demostrando que el Dr. Bernal puede tener la oportunidad de su vida.
"Sorpresas te da la vida", dice el refrán. Eso pasa cuando las campañas soberbias, como la del candidato del PRD a la alcaldía, piensan que como borregos, los votantes votarán plancha así no más. El elector ya aprendió a votar y eso lo veremos el 3 de mayo por la noche, en la hora de las decisiones.
