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Dijo que el miércoles a tempranas horas de la mañana unidades de la Policía Nacional lo llevaron a la Terminal de Transporte para que tomara un bus que lo llevaría a Aguadulce.  |
Con la esperanza de hacer una nueva vida, Ricardo Arosemena, tomó un riesgo que tal vez pocas personas, en su estado harían. Este hombre, de 57 años, depende de un equipo ortopédico que cubre su espalda y piernas, viajó desde la ciudad capital hasta Aguadulce en busca de un sitio donde vivir. En 1986, Arosemena laboraba como obrero de la construcción de una empresa encargada de una obra en la ciudad de Panamá.
La falta de equipo de seguridad y el error que pudieron haber cometido compañeros de trabajo, fueron las causas de ese accidente que cambió totalmente su vida. "Me encontraba parado sobre un andamio, en el tercer piso del edificio colocando unos bloques, cuando el exceso de peso por los materiales, ocasionó que se partiera, cayendo al suelo", indicó.
El resultado de este accidente fue la fractura de su columna vertebral en varias partes. De acuerdo con su historial clínico, fue operado en dos ocasiones de su columna en la sección vertical y tronco lumbar, quedando despegado de las partes afectadas. El informe señala que hubo rotura de la vena principal y se le extrajeron tres discos cervicales y cuatro del tronco lumbar (motor sensitivo muerto).
Ricardo es hipertenso, cardíaco y parapléjico de sus extremidades inferiores. Por el problema en sus piernas tiene que usar permanentemente faja ortopédica, corcel de Taylor y cuellera ortopédica. Su condición le ha impedido trabajar, por lo que no cuenta con recursos económicos.
FALTA DE RESPUESTA
Indicó que cuando fue operado por primera vez los funcionarios del Complejo Hospitalario Metropolitano de la Caja de Seguro Social (CSS), donde fue atendido, se encargaron de arreglar sus papeles para pensionarlo, ya que no podía trabajar.
Pero durante estos trámites, el Seguro descubrió que la compañía constructora era morosa y no tenía la capacidad para cubrir una indemnización. Ante este impedimento, recurrió al Sindicato Unico Nacional de Trabajadores de la Construcción y Similares (SUNTRACS), en busca de apoyo, pero la ayuda no llegó. Aparentemente los representantes de la compañía no fueron encontrados en el país.
LO ABANDONA SU FAMILIA
Arosemena sólo tenía cuatro meses de haberse unido con su segunda esposa cuando ocurrió este accidente, recayendo en ella la responsabilidad de sus cuidados, que según él, no cumplió. "Como ya yo no le servía me cambió por otra persona y para sacarme de la casa me acusó ante las autoridades de haber abusado sexualmente de una de sus hijas, cuando esto es falso", indicó.
PERMANECI� 39 MESES EN LA JOYA
Dijo que estuvo por espacio de tres meses detenido en el Centro Penitenciario La Joya, mientras se realizaban las investigaciones. A pesar de que se descubrió que esto era falso, a la hora de mi juicio me condenaron por corrupción, quedando recluido en este mismo penal, recalcó.
Aseguró que las autoridades le dieron libertad por enfermedad, pero como no tenía dónde vivir y su condición era delicada, decidieron dejarlo en el lugar por más tiempo. En el Centro Penitenciario La Joya permaneció hospitalizado por espacio de 39 meses hasta el 25 de junio de este año, como consta en su boleta de libertad.
FALSAS ESPERANZAS
En este sitio conoció a Justo Aguilar, quien está pagando una condena por varios años de cárcel, quien "al conocer que no tenía un lugar dónde vivir me ofreció su casa que está ubicada en la comunidad de Salitrosa en el distrito de Aguadulce".
Dijo que el miércoles a tempranas horas de la mañana unidades de la Policía Nacional lo llevaron a la Terminal de Transporte para que tomara un bus que lo llevaría a Aguadulce.
A las 11:00 a.m. llegó a esta ciudad y por seis horas permaneció sentado en la banca de la parada de buses que está ubicada a un lado de las oficinas de la Unión de Transporte de Aguadulce. Unidades de la Policía de Aguadulce trasladaron a esta persona a las oficinas del SINAPROC del área y voluntarios de esta última se dieron a la tarea de buscar a la familia de Aguilar.
Pudieron dar con el paradero de una hermana del interno, pero les informó que la casa a la cual ellos se referían no se encuentra en Salitrosa, como se había informado, sino en un área apartada de la comunidad de Calobre en la provincia de Veraguas. |